Se nutren de la ignorancia del pueblo, del rencor, del odio, de todo lo negativo que tiene el país. No ponen en duda los supuestos cuando se trata de aquellos que pueden hacer que el gobierno fracase y así poder ellos tomar el poder. Están allí, y siempre estuvieron. Emplean la treta, el chisme, y cuando es necesario no dudan en emplear la violencia para hacer ver al resto que todo está mal, y obviamente el culpable de todo lo malo es "el corrupto presidente" o "las malvadas transnacionales"
Ellos son siempre las víctimas perseguidas, son "la voz del pueblo", los "defensores de la justicia" y "los que luchan por acabar con el régimen corrupto" (sea cualquiera su linea politica).
Y es que no tienen más linea política que el odio per sé y una ambición a prueba de balas (sea por dinero, tierras, o lo que fuere, en una palabra SED DE PODER)
Y es que los buitres no tienen bandera. Están al acecho del fracaso del gobierno (sin importarles si ese fracaso se lleva de largo a casi treinta millones de peruano), con el fin de verlo un cadaver putrefacto y comer a sus anchas. Ven que con una política fiscal sólida y contra todo pronóstico el Perú ha resistido estoicamente la tempestad internacional. Ellos no tienen ni fe ni ganas de que este pais mejore. Exigen derechos sin cumplir deberes, violan la ley con el viejo argumento de "mi reclamo es válido, soy perseguido político". Si triunfan, ellos serán los "artífices del gran cambio", pero si fracasan le echarán la culpa de su fracaso al resto, al imperialismo yanqui y a las once mil vírgenes. Su objetivo es ser pequeños caciques, dueños de un pedazo del Perú en donde ellos serían la ley y el estado.
Son como vampiros que no quieren ver la luz del sol que es el progreso de la patria, que viene creciendo muchos años consecutivos, demostrando que en este país con un sistema de gobierno adecuado, un manejo fiscal cuidadoso (que les revienta, porque piensan que las reservas son su caja chica), el país si tiene mucho, y mucho futuro .
Falta mucho que hacer en el Perú, es cierto. Pero como nunca, tenemos la oportunidad de tener un cambio sostenible en el tiempo y no una bonanza pasajera como en épocas de caucho, guano o salitre. Este cambio debe empezar por la educación (de calidad, planificada, sin ser entregada a sindicatos politizados y con 0 ganas de educar a los niños y jóvenes). La educación es lo único que puede salvar al Perú de los buitres. En un país más educado, los radicalismos quedan cada vez más rezagados. Estemos alertas con los buitres, aves de rapiña que buscan masificar su mensaje entre los sectores mas pobres e ignorantes para destruir lo que se ha avanzado con esfuerzo.
Espero que el Señor Humala no se deje llevar por varios buitres que pululan alrededor de él y priorice los grandes objetivos del país.
Estuvieron ahi y siempre estaran. Hoy, a muchos de estos buitres les tocara repartirse el cadaver que otros dejaron por falta de tiempo. Sin embargo, no dudes que creceran sus egos como las olas de un potente tsunami, y arrasaran con quien sea y con lo que sea con tal de llenar sus intereses particulares.
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